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Las naranjas y mandarinas son frutas conocidas por su delicioso sabor y sus numerosos beneficios para la salud. Entre estos beneficios se encuentra su capacidad para ayudar a reducir los niveles de colesterol en el organismo.

En este artículo, te contaremos cómo pueden contribuir estas frutas a la mejora de nuestra salud cardiovascular al reducir el colesterol LDL, comúnmente conocido como «colesterol malo».

Qué es el colesterol bueno y malo

El colesterol HDL o colesterol de alta densidad es conocido como el colesterol «bueno». Se considera beneficioso para la salud cardiovascular porque ayuda a eliminar el exceso de colesterol de las arterias y lo transporta de vuelta al hígado, donde se descompone y elimina del cuerpo. El colesterol HDL actúa como un limpiador de las arterias, ayudando a prevenir la acumulación de placa y reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas.

Por otro lado, el colesterol LDL o colesterol de baja densidad es conocido como el colesterol «malo». Este tipo de colesterol puede acumularse en las paredes de las arterias, formando placas que estrechan las arterias y dificultan el flujo sanguíneo. Además, el colesterol LDL aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas y otros problemas de salud relacionados con el corazón.

Cómo ayudan las naranjas y mandarinas a bajar el colesterol malo

Las naranjas y mandarinas son frutas cítricas que ofrecen una serie de beneficios para la salud cardiovascular, incluyendo la capacidad de ayudar a bajar el colesterol LDL o «colesterol malo». Estas frutas son ricas en fibra soluble, especialmente en la forma de pectina, que puede ayudar a disminuir la absorción de colesterol en el torrente sanguíneo y promover su eliminación del cuerpo.

Además de la fibra, las naranjas y mandarinas contienen fitoquímicos, como los flavonoides, y tienen propiedades antioxidantes antiinflamatorias. Estas sustancias pueden ayudar a proteger el revestimiento de los vasos sanguíneos, a reducir la inflamación y a prevenir la formación de placa en las arterias, lo que contribuye a mantener niveles saludables de colesterol en la sangre.

Además, el consumo regular de naranjas y mandarinas como parte de una dieta equilibrada y saludable puede ayudar a mejorar los perfiles de colesterol y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Por lo tanto, estas frutas son una opción deliciosa y nutritiva para incorporar a tu dieta diaria y promover una salud óptima del corazón.

Cómo implementar las naranjas y mandarinas en tu dieta

Incorporar naranjas y mandarinas a tu dieta diaria te permitirá aprovechar sus beneficios para la salud y ayudar a reducir el colesterol LDL en tu organismo. Puedes experimentar con diferentes formas de disfrutar de estas frutas para mantener una alimentación equilibrada y nutritiva, pero nosotros te recomendamos las siguientes:

Consúmelas frescas como tentempié

Una forma sencilla de incorporar naranjas y mandarinas a tu dieta es consumirlas frescas como tentempié entre comidas. Puedes llevar contigo una naranja o un par de mandarinas para disfrutar de un bocado saludable y refrescante en cualquier momento del día.

Agrégalas a ensaladas

Corta rodajas de naranjas o mandarinas y agrégalas a tus ensaladas. La combinación de sabores dulces y cítricos de las naranjas y mandarinas combina perfectamente con el sabor de las verduras, proporcionando un toque de frescura y vitalidad a tus platos.

Exprímelas para hacer zumo

Exprime naranjas y mandarinas para obtener su delicioso zumo casero. Puedes disfrutar de un vaso de zumo de naranja en el desayuno o como parte de un refrigerio energizante a lo largo del día. Opta por el zumo recién exprimido en lugar de las variedades procesadas para obtener todos los beneficios nutricionales de estas frutas.

Por cierto, ¿sabías que no es verdad todo lo que se dice del zumo de naranja? En este otro artículo te contamos sus mitos y verdades.

Incorpóralas en tus recetas dulces y saladas

Utilizar naranjas y mandarinas como ingredientes en tus recetas dulces y saladas siempre es una buena idea. Desde postres como tartas y sorbetes hasta platos principales como pollo a la naranja o ensaladas malagueñas.

Prepara mermeladas y conservas

Aprovecha la temporada de naranjas y mandarinas para preparar mermeladas caseras y conservas. Estas opciones te permiten disfrutar del sabor natural de estas frutas durante todo el año y añadir un toque casero a tus desayunos y meriendas.

¿Quieres conservar nuestras naranjas durante más tiempo en tu hogar para disfrutarlas todo el año? En este otro artículo te contamos cómo conseguirlo.

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